Antiviral

Antiviral supone el debut de Brandon Cronenberg, hijo de aclamado director David Cronenberg, pero Brandon no solo firma la dirección de l...

Antiviral supone el debut de Brandon Cronenberg, hijo de aclamado director David Cronenberg, pero Brandon no solo firma la dirección de la cinta si no que además es autor del guión de la misma; un thriller (literalmente) enfermizo sobre la obsesión por los famosos llevada al extremo de querer padecer sus mismas enfermedades.

Desde el primer momento Antiviral genera una sensación de incomodidad: quizás sus escenarios austeros y blancos (y es que no nos olvidemos que vivimos entre clínicas médicas), los diálogos concisos y secos y ese hombre ante la cámara: Syd March a quien da vida Caleb Landry Jones, que aquí da más grima de lo habitual, quien lleva sobre si el peso total de una cinta que naufraga minutos a minuto.

Estamos de acuerdo que Brandon juega con el contra de ser el hijo de David Cronenberg ya que su padre en sus cintas ha buscado ese punto que consigue que el espectador no quede indiferente ante ellas; reconozco que Cronenberg, sin ser uno de los directores que más me gusten, ha tenido una carrera brillante... exacto, "una carrera" y es que aquí está el primer gran problema de Brandon Cronenberg que quizás su Antiviral tiene demasiadas aspiraciones para ser un debut. En este debut se acerca a Videodrome, pero a la vez toca algo de La Mosca con el trasfondo social de Crash (por hacer una analogía con las cintas de su padre), vamos, que quiere hacer muchas cosas pero ninguna sale realmente bien.

Tras lo dicho ¿es Antiviral una mala película? Pues realmente no. Es previsible y pretenciosa pero no es mala, quizás sí incómoda por su manera de exponer el tema... sí, la dirección es buena, la fotografía y la estética también lo son y la actuación es sobresaliente pero extrañamente me deja frío, mucho. En ningún momento me he sentido próximo a la cinta, es demasiado aséptica, haciendo un símil esta cinta es como un pastilla: sí, es buena pero realmente es un componente extraño que nos genera desconfianza.

Pasemos ahora a Caleb Landry Jones... solo con verlo transmite esa sensación enfermiza tan necesaria para Antiviral, es sin duda "el personaje" de la cinta y es que como ya hemos dicho él solo carga con el peso de la misma. Desde el primer momento transmite al espectador una imagen de enfermo, una enfermedad que poco a poco iremos desgranando a lo largo de la cinta. Sí, sin duda lo mejor y parte de lo más impactante de la misma.

Tras pensarlo y cambiar en varias ocasiones de idea he decidido otorgar a Antiviral:


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