Focus

Will Smith es guapo desde siempre lo sabemos y desde Hitch además lo hemos convertido en un hombre la mar de atractivo, Focus no es má...


Will Smith es guapo desde siempre lo sabemos y desde Hitch además lo hemos convertido en un hombre la mar de atractivo, Focus no es más que eso, una nueva película en la que Will Smith, sonríe, hace un par de chistes, se quita la camiseta y seduce a los espectadores. Pero ¿qué pasa si en vez de los chicos lo que te gustan son las chicas? Pues resolvemos el problema poniendole al lado a una chica guapa... y seamos realistas: él es negro, atractivo, alto, fornido, de ojos oscuros ¿qué lo complementa bien? Sí, una rubia de ojos claros y piel casi transparente que se pasa vistiendo de oscuro toda la cinta, sí: Margot  Robbie.

En Focus, Smith se viste de estafador, del mejor y mayor estafador conocido, un hombre capa de superar a su padre y a su abuelo... vamos, un estafador de estirpe. Un estafador que una noche se cruza con una atractiva mujer que se inicia en el mundo de las estafas y a quien decide tutorizar... Focus podría ser una comedia romántica que sin duda Smith solventaría sin problemas pero no, Focus pretende ser en un thriller de estafas pero cumpliendo todos y cada uno de los tópicos anteriormente establecidos en este subgénero de estafadores. Una película que bien podría encajar dentro de la familia Oceans con Will Smith en lugar de Clooney y es que Smith ya ha entrado en esa edad en la que las películas como Focus se convierten en planes pensiones.

Cierto es que Focus tiene un par de secuencias muy interesantes pero más por el uso efectivo y efectista de la banda sonora que por la historia en si misma. Y es ahí cuando Focus cae: tú, como espectador estás viendo una película entretenida sin esperar nada pero de repente Focus te dice "y ahora te voy a estafar a ti...", el espectador despierta de su "letargo" y comienza a intentar descubrir el truco: ahí Focus peca de inverosímil y cae... comienzan a ser evidentes los trucos y las situaciones que antes tan solo veíamos comienzan a ser cuestionadas y las lagunas se hacen evidentes.

Focus funciona, es indudable: son guapos, bellos e inalcanzables para el resto de nosotros, mortales no invitados al Olimpo. Pero no es una buena película: no sabemos el por qué de la ruptura y sinceramente el truco final es demasiado evidente... Focus aspira a ser algo que no logra, pretende ser un thriller con pinceladas de comedia romántica o viceversa. Por ello hemos decidido otorgarle:

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